La Virgen de las Nieves de Gabia la Grande, una leyenda hecha historia.
Siento los recuerdos de mi niñez en los años cincuenta, como si estuvieran presentes ahora mismo, las mañas frías y las tardes-noches oscuras de viento y agua, acompañando en la subida de la cuesta a la Ermita, la que pega donde vivía La Pirripa y El Pellejero, llena de piedras y chinos, un piso muy irregular, a una tía mía que, luego ingreso en el convento de las Madres Agustinas Recoletas, subiéndola (ella) de rodillas por no sé qué promesa, todos los días, durante mucho tiempo, que entonces me parecía una eternidad tanto el que tardaba en subirla, como la cantidad de veces que realizaba este sacrificio. En estos acompañamientos, me venían a la mente los comentarios que circulaban entre la chiquillería del pueblo, respecto de las leyendas del origen de la Virgen de las Nieves, encontrando mi pensamiento acomodo en una virgen muy antigua, de antes de la llegada de los musulmanes, que por un capricho del azar se había mantenido durante los ocho siglos de dominación musulmana, la devoción de los habitantes que habían poblado Gabia la Grande. Pronto, conforme me fui haciendo mayor, comprendí que esa realidad generada por mi mente no podía ser tal como la había imaginado, solo en parte era cierta esta idea, porque el cristianismo en estas tierras, estuvo presente de forma manifiesta, al menos hasta principios del siglo XII. Siempre quise saber el origen y porque la habían elegido.
Este relato que narro a continuación, da luz a la gran cantidad de leyendas que han circulado por el pueblo, en diferentes versiones, que pretendían trasmitir los relatos orales que originaron su entronización. Algunos sin duda estaban contaminados de otros ajenos a estas tierras, pero que servían para engrandecer y justificar la devoción que ha habido en Gabia por esta Virgen de las Nieves.
Nos cuenta Jorquera en sus Anales de Granada (p. 573), que el 5 de Agosto de 1611 día de Nuestra Señora de las Nieves por la tarde, se levanto un grandísimo torbellino y tempestad de agua y piedra en la Vega de Granada que duro poco más de media hora, el cual hizo muchísimo daño en las heredades, huertas y otras haciendas del campo y en particular en el lugar de Alhendin1, dejo destruidas las viñas de su término y olivares, fue dañado de tal manera, que no se cogió vino ni aceite en el dicho lugar y para memoria de tan grande inundación los vecinos hicieron votos y promesa unánimes de guardar y festejar por siempre jamás este día. Por la tradición oral conocemos una narración parecida en nuestro pueblo, aunque ampliada la misma, por la caída de un rayo en la Ermita y que este no causo perjuicio ni daño a nada ni a nadie, por lo que se ampliaba la veneración a la virgen por este motivo, aunque en la leyenda no queda claro si ya era la Virgen de las Nieves la patrona del pueblo, aunque entiendo que, con anterioridad a estas fechas, debía ser la Virgen del Rosario, por la siguiente razones: Una de ellas es que, la patrona de Gabia la Chica, Hijar y Cullar es la Virgen del Rosario y en ese tiempo, desde la Bula de constitución de la Iglesias de Granada en 1501 solo existía una parroquia, la de Gabia La Grande y estos pueblos eran anejos de ella, con lo que es más que probable que, el cambio producido en Gabia, no se realizara en estas poblaciones, conservando la tradición de más de cien años, de veneración a la patrona anterior que la habían tenido desde la reconquista, o al menos desde 1501.Encuentro otra razón en comentarios leídos no recuerdo donde, pero debe ser en algún programa de fiestas, en el que indicaban que antiguamente esta festividad se celebraban en octubre, coincidiendo estas fechas, con la celebración el siete de ese mismo mes, la festividad de la Virgen del Rosario.
Entre los años 1611 que ocurre este suceso y el 25 de mayo de1615 que se encarga la talla de la imagen de la virgen al escultor granadino Bernabé Gaviria por el alcalde ordinario Luis Sánchez de Castro, deberá aparecer en las actas de la iglesia de Gabia la Grande, la asamblea celebrada para aprobar como patrona, a la Virgen de las Nieves. (Espero haya ocasión de contrastar este dato) No como ocurrió en Alhendín y en otros pueblos que sus habitantes hicieron voto y promesa solemne de celebrar el día de la Virgen de las Nieves, por siempre jamás y sabemos que, luego el 27de noviembre 1656 los de Alhendín recibieron triunfantes la procesión que venía de Granada con su patrona la Inmaculada, del famoso escultor Pedro de Mena”. Desconocemos las razones que tuvieron los de Alhendin para cambiar de parecer, sin embargo en Gabia la Grande y Dilar2, si se conservo con mucha devoción popular, el cinco de Agosto, como día de su Patrona. Desvelar los entresijos de porque se mantuvo en nuestro pueblo la devoción a la Virgen de las Nieves, quizás habría que buscarla en el origen de algunos de los repobladores y cristianos viejos que eran oriundos de la provincia de Cádiz, y más particularmente de Arcos. Como es sabido, esta población también tiene por patrona esta misma virgen. Profundizar en este tema, se hace necesario para avanzar en el conocimiento de la motivación que origino el cambio de patrona, independientemente de la realidad reflejada mas arriba.
1 Relato recogido por Brujido Ponce de León en su Historia de Alhendin.
2 De Dilar conocemos un relato parecido al anterior, que le ocurrió al párroco de un pueblo de la Alpujarra, al atravesar sierra nevada en este día y que salvándose de la tormenta, costeo la construcción de la ermita vieja a la Virgen de las Nieves de ese pueblo.
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